Según las crónicas y los testimonios de los supervivientes, unas cuatro mil personas fueron fusiladas en el Barranco del Carrizal, en Órgiva (Andalucía).
Hace unos años y, presidiendo en Barranco de Poqueira se instaló este monolito como homenaje a todas esas personas que aún permanecen enterradas de modo anónimo en estos parajes de la Alpujarra Granadina "y a todos los que se vieron inmersos en la injusticia de la guerra" (sic).
«A Pilar Góngora le es difícil olvidar las atrocidades de aquella guerra que su padres y abuelos les contaban a ella y a sus otros cinco hermanos. Recordar, por ejemplo, cuando su madre Ana -que en la contienda tenía unos 10 años- rememoraba el día que estaba guardando cabras en el barranco Verdevique (Cástaras), cerca del paraje Los Morenos, se escondió atemorizada al ver unos guardias civiles que comenzaron a matar a un grupo de unas diez personas, entre ellas, un niño de 14 años. Pero lo peor no fue lo que vio sino lo que oyó. Y oyó las palabras que aquel niño le dirigió a uno de sus verdugos:
-¿Me vas a matar que soy tu hijo?
Ana cerró los ojos y escuchó el disparo. En verdad era su hijo. Todo el mundo de la zona lo sabía. Se trataba de un hijo ilegítimo.»
Fuente: IDEAL.es
Fotografía -1-: Homenaje a aquellos que lucharon por la Libertad
Fotografía -2-: Homenaje a aquellos que lucharon por la Libertad
Autor: Landahlauts